sábado, 25 de abril de 2009

influenzada

Pues nada, muchos llevan cubrebocas, incluso para ir al antro, los museos estàn cerrados, hay una especie de pànico, ya no se consiguen cubrebocas en las farmacias y los ambulantes los venden a dos por cinco, es la capital, yo què voy a decir, a mi me fascina esta ciudad. Yo no llevo cubrebocas, no me gustarìa, me darìa una especie de claustrofobia, no me gusta que me falte el aire. Què chidos y que pinches caros son los libros para niños, los de adultos son tambièn chidos, y tambièn caros.

1 comentario:

Aquí su pendejo dijo...

la influenza nos lleva de una epidemia viral a una social que presupondría sacarnos el tapabocas para denunciar las otras tantas cosas por las que deberíamos tener una actitud en común como ciudadanos..
joder