Domo arigato míster roboto

La carretera Delicias Chihuahua, de ida y vuelta, demasiada bruma y humedad, algunos ocotillos ya florecen, yo, respirando el aire que se siente ya frío, tratando de abarcarlo, mi instructora de yoga, a quien por cierto no planeo ver hoy, y menos en las circunstancias seudo lésbicas de la semana pasada, me ha sugerido respirar hondo, pues dice, tomo muy poco aire y expulso mucho, “que no te de miedo abarcar, es todo para ti”, y el aire mas puro y con olor a río cercano es de lo mejor que busco, pensando en ella concluyo que la semana pasada he tenido encuentros extraños, gente del pasado, que aparece con actitudes diferentes, una suerte de reconciliación, gente desconocida que de pronto aparece muy cerca, y desaparece de la misma manera, pues creo, debe ser así, y gente que añoro y que no tengo idea de que hace en este momento, amigos de siempre que me rodean y a los que veo poco, pero siempre con la misma complicidad, ya estoy un poco fastidiada de la humedad e incluso mis rodillas lo resienten, y este clima no ayuda contra la ansiedad, en cuanto al estrés creo que la respiración ayuda demasiado, pero la ansiedad aún no es controlable, con muy poco alcohol estoy muy ebria, esta onda puberta de no encontrar mi lugar. Quiero salir esta noche, creo el momo ni abre…joder, me siento aburrida y hasta se nota en esta entrada jeje. Los amigos de Letras me sugieren no debo justificar mis textos, no los justifiquen uds, a mi no me jodan, en mi changarro mando yo.